lunes, 13 de septiembre de 2010

Ese angustia en el pecho y ese pánico.

Hoy me levanté a las 6:30, cuando sonó el despertador para ir a la facultad y lo apagué y seguí durmiendo. Me da bastante verguenza y bronca decir que me levanté a las 10 am.
Esta cuestión de que el trabajo no me exiga un horario por un lado me da estas chances, pero por el otro hace que haga algo tan patético como dormir hasta las 10 am un lunes comienzo de semana.

Durante el día agradecí cada minuto en el que pude sacarme de encima el ahogo ese de la angustia en el medio del pecho. Volvía de a ratos, y eso hizo que valore cuando se iba y podía estar un ratito respirando bien.

A las 4 y pico, en medio de una reunión me suena el celular como cuando recibo un mail y llega esto:

Hola como andas??? Queria saber de vos, saber como estas? si estas bien? Me gusta saber de vos por mas que no estemos juntos. Si te molesta recibir un mail mio decime q no te mando mas. Besos.

Esa angustia en el pecho y ese pánico es lo que siento ahora. La angustia, por saber como dije en el post anterior los tiempos que se vienen. El pánico es ese nuevo, de que en cualquier momento irrumpa un mensaje como ese y me derrumbe la tarde y la poquitita estabilidad emocional que iba construyendo.

Una vez más repito: No se porqué escribo acá, solamente se que estoy intentando sentirme un poco mejor. Y de repente cuando abro el mail y alguien que leyó acá a pesar de no conocerme me tiró una palabra de aliento, pucha que encuentro algunos significados.

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1 comentario:

  1. A mi me pasa iguañ, tal vez canalizamos algo de otra persona. Lo bueno es que la angustia se va yendo, resisti.

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Y a vos, ¿Qué te pasa?